Relato enviado por Ramón (Barcelona)
Matilde, 52 años, profesora de idiomas en Barcelona. —Mi apetito sexual ha ido en aumento desde que superé el período de la menopausia. Supongo que ésta es una de las ironías de la vida biológica. Pues me apareció justo en la época que yo sentía que el acto sexual era algo hermoso, que valía la pena, tanto que hervía de deseos apenas terminaba de comer.