Fantasías sexuales

Las fantasías sexuales son escenas cargadas de erotismo que nuestro cerebro construye para que el cuerpo sea el encargado de disfrutarlas, cada impulso puede llegar a producir hormonas que generan ese placer sexual necesario para cada ser humano. Nuestras fantasías están asociadas a los sentidos y generalmente se convierten en un recurso sexual donde todo está permitido.

Admitámoslo, todos tenemos alguna fantasia sexual inconfesable: sueños políticamente incorrectos o considerados de baja moral. O quizás nuestra fantasía no es tan extravagante y hemos tratado de llevarla a cabo, sin éxito hasta la fecha.

Algunas fantasías eróticas son demasiado excéntricas incluso para confesar a los amigos después de unas copas… pero ahí están, acompañándonos cada día, como un deseo incontrolable que necesitamos compartir y hacer realidad de alguna manera.

Haz realidad tus fantasias eroticas

Vivimos tratando de ser correctos, agradables y educados, entonces, ¿cómo sacar este lado oscuro lleno de fantasías sexuales?

Porque está claro que necesitamos una vía de escape, un espacio en el que desfogarnos y liberar esas inquietantes fantasías… y como todo en la vida, el sexo, compartido, sabe mucho mejor.

Por eso, desde hace años, hay muchas personas que recurren a las líneas eróticas para hacer realidad sus fantasías sexuales, pasar un rato divertido, soltar los deseos más locos y desatar sus historias morbosas con alguien al otro lado del teléfono que sepa exactamente lo que queremos y cómo lo queremos.

Hay asiduos a las “llamadas eróticas” que encuentran en las pajas por teléfono una manera diferente y muy excitante de tener sexo, en cualquier momento, lugar y circunstancia.

Porque llamar a una línea de fantasías sexuales es la manera más cómoda, estimulante y rápida para satisfacer necesidades, sin esperas y con alguien al otro lado que sabe guiarnos para lograr el máximo placer y desinhibición. Por eso tantos repiten.

Fantasias sexuales en hombres

El sexo a distancia desde el anonimato y la más absoluta privacidad, tiene la gran ventaja de que puede satisfacer cualquier fantasías sexual, por muy perversa que sea: podemos someternos a una exigente dominatrix, hablar con mujeres maduras cachondas o pasar un rato con prácticamente cualquier tía tetona, culona o rechonchona que podamos soñar. Tú decides con quién quieres hablar.

El límite es la imaginación… y en las fantasias todo es posible. Porque de vez en cuando es necesario y muy sano dejarse llevar…